Tuvieron que pasar unos 40 años para que las rutas nacionales 22 y 3 Sur vuelvan a ser forestadas.En este caso, de la mano de la primer Cooperativa de Forestación del país con base en el Vivero Forestal Argerich.
Esta iniciativa es parte del proyecto de "Adaptación del Sudoeste al Cambio Climático" que Villarino lleva adelante junto con organismos nacionales e internacionales.
Según se mencionó desde fuentes comunales "el programa se encuentra en plena ejecución y prevé la implantación de 15 cortinas forestales con 600 ejemplares cada una.Ya se están terminando las primeras 2 con un total de más de 1200 especies nativas, siendo el objetivo el incorporar además cortinas forestales en campos y otras zonas, para reducir la erosión de los suelos, aumentar la biodiversidad y evitar la voladura de terrenos cultivables y polvo en suspensión en épocas de sequía".
Así mismo el informe destacó que "se realizaron inversiones en invernaderos y maquinaria agrícola y forestal. Además, se adquirieron semillas, plantas madres y estacas de nativas, álamos, caldenes, fresnos, algarrobos y casuarinas, entre otras especies, que permitirán crear módulos de reproducción y disposición inmediata de nativas en los viveros municipales de Villarino para las implantaciones".
De esta manera se está trabajando en zonas estratégicas del sudoeste para combatir y hacer frente las implicancias de la variabilidad climática y la desertificación.